Mundo Lenguaje es una ventana abierta al diálogo entre los estudiantes de licenciatura de lengua castellana de la Universidad de Pamplona (Cread Chía).

En sus páginas encontraremos lecturas y diversas actividades provocadoras de reflexiones e inquietudes entorno al lenguaje en todas sus dimensiones: su relación con el pensamiento y la comunicación, en su contexto social, su estructura dialógica y su mundo fantástico de creación.



¡BIENVENIDOS!

viernes, 17 de junio de 2011

EL DERECHO A SOÑAR


EDUARDO GALEANO



El nuevo milenio nace un primero de enero por obra y gracia de un capricho de los senadores del imperio romano, que un buen día decidieron romper  la tradición que mandaba celebrar el año nuevo en el comienzo de la primavera. Y la cuenta de los años de la era cristiana proviene de otro capricho: un buen día, el papa de Roma decidió poner fecha al nacimiento de Jesús, aunque nadie sabe cuándo nació. 
 
El tiempo se burla de los límites que le inventamos para creernos el cuento de que él nos obedece; pero el mundo entero celebra y teme esta frontera. Una invitación al vuelo. Milenio va,  milenio viene, la ocasión es propicia para que los oradores de inflamada verba peroren sobre el destino de la humanidad, y para que los voceros de la ira de Dios anuncien el fin del mundo y la reventazón general, mientras el tiempo continúa, calladito la boca, su caminata a lo largo de la eternidad y del misterio.
 
La verdad sea dicha, no hay quien resista: en una fecha así, por arbitraria que sea, cualquiera siente la tentación de preguntarse cómo será el tiempo que será. Y vaya uno a saber cómo será.  Tenemos una única certeza: en el siglo veintiuno, si todavía estamos aquí, todos nosotros seremos gente del siglo pasado y, peor todavía, seremos gente del pasado milenio. 
 
Aunque no podemos adivinar el tiempo que será, sí que tenemos, al menos, el derecho de imaginar el que queremos que sea. En 1948 y en 1976, las Naciones Unidas proclamaron extensas listas de derechos humanos; pero la inmensa mayoría de la humanidad no tiene más que el derecho de ver, oír y callar. 
 
¿Qué tal si empezamos a ejercer el jamás proclamado  derecho de soñar? ¿Qué tal si deliramos, por un ratito?
 
Vamos a clavar los ojos más allá de la infamia, para adivinar otro mundo posible: el aire estará limpio de todo veneno que no venga de los miedos humanos y de las humanas pasiones; en las calles, los automóviles serán aplastados por los perros; la gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por la computadora, ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor; el televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia, y será tratado como la plancha o el lavarropas.
 
La gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar; se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez, que cometen quienes viven por tener o por ganar, en vez de vivir por vivir nomás, como canta el pájaro sin saber que canta y como juega el niño sin saber que juega.
 
En ningún país irán presos los muchachos que se niegan a cumplir el servicio militar, sino los que quieran cumplirlo; los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo, ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas; los cocineros no creerán que a las langostas les encanta que las hiervan vivas; los historiadores no creerán que a los países les encanta ser invadidos; los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas; la solemnidad se dejará de creer que es una virtud, y nadie tomará en serio a nadie que no sea capaz de tomarse el pelo; la muerte y el dinero perderán sus mágicos poderes, y ni por defunción  ni por fortuna se convertirá el canalla en virtuoso caballero. 
 
Nadie será considerado héroe ni tonto por hacer lo que cree justo en lugar de hacer lo que más le conviene; el mundo ya no estará en guerra contra los pobres, sino contra la pobreza, y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra.
 
La comida no será una mercancía, ni la comunicación un negocio, porque la comida y la comunicación son derechos humanos; nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión; los niños de la calle no serán tratados como si fueran basura, porque no habrá niños de la calle; los niños ricos no serán tratados como si fueran dinero, porque no habrá niños ricos. 
 
La educación no será el privilegio de quienes puedan pagarla;  la policía no será la maldición de quienes no puedan comprarla; la justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, bien pegaditas, espalda contra espalda; una mujer, negra, será presidenta de Brasil y otra mujer, negra, será presidenta de los Estados Unidos de América; una mujer india gobernará Guatemala y otra, Perú; en Argentina, las locas de Plaza de Mayo serán un ejemplo de salud mental, porque ellas se negaron a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria. 

La Santa Madre Iglesia corregirá las erratas de las tablas de Moisés, y el sexto mandamiento ordenará festejar el cuerpo; la Iglesia también dictará otro mandamiento, que se le había olvidado a Dios: "Amarás a la naturaleza, de la que formas parte"; serán reforestados  los desiertos del mundo y los desiertos del alma; los desesperados serán esperados y los perdidos serán encontrados, porque ellos son los que se desesperaron de tanto esperar y los que se perdieron de tanto buscar; seremos compatriotas y contemporáneos de todos los que tengan voluntad de justicia y voluntad de belleza, hayan nacido donde hayan nacido y hayan vivido cuando hayan vivido, sin que importen ni un poquito las fronteras del mapa o del tiempo; la perfección seguirá siendo el aburrido privilegio de los dioses; pero en este mundo chambón y  jodido, cada noche será vivida como si fuera la última y cada día como si fuera el primero.

EVALUAR EN EL AULA: ¿CONDICIONAR O FORMAR SERES HUMANOS?.

REFLEXIONES PEDAGÓGICAS.


CLAUDIA FERNANDA RIVERA HERNÁNDEZ
Docente Humanidades.
Magister en Desarrollo Educativo y Social



Constatar que los niños y  jóvenes de hoy se encuentran inmersos en un mundo convulso, con paradigmas por construir, conlleva, en los últimos tiempos a una reformulación de las políticas educativas en la imperante necesidad de “formar estudiantes con la capacidad o disposición para dar solución a problemas reales y producir nuevos conocimientos”[1]. Se habla hoy de qué tan competente resulta ser el joven bachiller para enfrentar la vida práctica, en acciones concretas con las herramientas que un aprendizaje significativo (más allá de la memorización y la rutina) le proporciona a lo largo de su estancia educativa, para situarse en su entorno en busca de raíces culturales que le permitan cualificar su desempeño al servicio de la colectividad. La ley 115 nos sitúa en tal contexto y nos incorpora un nuevo concepto de educación, entendida como “un proceso de formación permanente, personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción integral de la persona humana, de su dignidad, de sus derechos y de sus deberes”.  Consecuentes con lo anterior, Indagar sobre las prácticas evaluativas en el aula, en el marco del intercambio que el taller “Pruebas comprender de Lenguaje” convocado por la Secretaría de Educación el pasado 9 de octubre,  nos posibilita a los docentes del Distrito aceptar que los conceptos epistemológicos aplicables al quehacer docente deben ir más allá en su interpretación necesariamente acorde con una sociedad  que se estructura polifónicamente en la  variedad de actores en contextos disímiles.

Reconocer hoy que la evaluación sólo sirve para aproximarnos a la realidad del hombre, nos lleva a la desmitificación de aquel tipo  de pruebas cerradas a las que nuestra memoria nos remite con cierto sudor en las manos en donde lo que se nos pedía era transcribir en las hojas el saber estricto del docente. Si nos acercábamos fielmente a él podríamos obtener una alta calificación pero, si al contrario, nos atrevíamos a ir más allá o a refutar aquel saber,  nuestra calificación tendría un tinte  rojo.  Hoy sabemos con certeza que la verdad no es absoluta, que el conocimiento se construye a partir de las vivencias de cada quien, de tal forma que aprender hoy se traduce en aprender de forma significativa competencias necesarias para resolver problemas en situaciones concretas.

Bastó observar la proyección de dos videos de experiencias de aula, en donde básicamente se ponía de relieve formas de evaluar la construcción de textos en estudiantes tanto de la básica primaria como de la básica secundaria.  Corroboramos cómo entorno a un ejercicio de puesta en común, los métodos evaluativos fueron posibles desde diversos ángulos. De forma interactiva, se hicieron presente: una autoevaluación, buscando llevar al estudiante a la identificación de sus propias carencias y el diseño estratégico de soluciones concretas; una coevaluación, buscando la cooperación y el respeto por el otro en tanto se pueden ayudar mutuamente estimulando la superación espontánea de las dificultades comunes; una heteroevaluación, en el reconocimiento del docente- orientador y evaluador a la par del estudiante constructor de su propio aprendizaje; y una evaluación individual sin mayor protagonismo en este espacio, subyacente en la evidencia de un ejercicio no manipulado y una organizada participación de los estudiantes en aproximación  adecuada al uso de las habilidades del lenguaje y la apropiación del saber entorno a una tipología textual ampliamente abordada. Una u otra, todas o ninguna, es claro que no existen manuales, ni recetas de cocina, los  métodos de aprendizaje y por lo tanto los evaluativos, se construyen en las realidades concretas,  en los intentos de querer captar la atención dispersa de los chicos. Esta y tantas otras experiencias nos llevan a deducir, de igual forma,  que más que dictámenes, el docente requiere de una alta sensibilidad para hallar el método adecuado.

Muy pronto el debate nos llevó a verificar qué tan objetiva o subjetiva debe ser la evaluación,  para deducir a la luz de las vivencias de cada quien,  que tan subjetivo es quien evalúa como quien es evaluado. Cada docente en su individualidad prevé su ideal de perfección a partir de la observación directa de las necesidades reales del contexto donde desarrolla su quehacer, de tal forma que lo objetivo se presenta como la meta o el fin a donde se quiere llegar. La subjetividad se impone en el docente a partir de sus propios enfoques y paradigmas, de la misma forma que se impone en los educandos con las diferentes aproximaciones que tienen para acceder al conocimiento de acuerdo a sus intereses y habilidades. Sería absurdo por lo tanto, tener un mismo rasero de medición, la estandarización de la nota se presenta obsoleta hoy, los sistemas de calificación “objetivos” suelen entorpecer el proceso de la enseñanza- aprendizaje.  De nuevo, vemos cómo se desvirtúa la concepción de una evaluación para promover al estudiante, antes que eso, se nos configura una evaluación  para conocer en qué estado se encuentran unos procesos que el maestro está desarrollando con el fin de hacer crecer a los niños.
Por otro lado, si algo debe estar lejos de mediciones castradoras, es el aprendizaje de la lectura y la escritura. Estas dos, en tanto vitales para el desarrollo humano y social de los seres, deben desarrollarse de forma libre y espontánea. El niño nace predispuesto para una lectura natural del mundo, lleva dentro de sí una necesidad imperante de comunicación con los otros, de tal forma que en el aprendizaje de las primeras letras basta con incentivar dicha predisposición de forma lúdica para que el proceso sea positivo. Personalmente, recuerdo mi experiencia temprana cuando a la edad de siete años escribía cartas con una de mis primas con quien pasaba mis vacaciones y me sentía plenamente identificada,  pero que desafortunadamente vivía lejos.  Ahora, veo que ese ejercicio permanente, motivado por tener una comunicación constante  con alguien cercano a mis afectos, me permitió consolidar un hábito que con el tiempo se ha vuelto una herramienta fundamental para mi quehacer. Más tarde, inmersa en el aprendizaje de mi hija, con poco tiempo para compartir, en un distanciamiento menor por mi trabajo al no poder verla durante el día, decido dejarle mensajes en un tablero que adecué en su cuarto, con algunas expresiones de mi reiterado cariño y algunas instrucciones por hacer en casa.  Ella, quien en ese entonces contaba con cinco años y el silabeo de las primeras palabras entre sus cuadernos, acoge mis mensajes y me responde frases pequeñas. Noto  con alegría que en poco tiempo se adelanta al programa de su maestra, quien inquieta me interroga y decide proponer lo mismo para sus otros niños. Los resultados fueron asombrosos al final del curso. Estos pequeños descubrieron en la calidez de las palabras escritas de sus padres el sentido práctico del símbolo lingüístico.

Hoy desde mi quehacer docente intento que mis estudiantes escriban textos motivados por sus sentimientos e inquietudes. Los llevo a indagar en lo más profundo de sus experiencias vitales, al tiempo que recurren en sus referentes de lecturas hechas en diversos textos sugeridos por mi deducción sobre sus intereses particulares, para tener “pretextos de hacer textos” con una intencionalidad clara y definida, partiendo de la certeza que la lectura facilita el proceso de la escritura en tanto se adquiere un cúmulo de información para recrear mundos posibles. En aras de hacer del proceso lecto-escritor un aprendizaje significativo,  buscamos interlocutores y es entonces, cuando el periódico mural, la rotación de textos intercursos, los concursos de narrativa, etc. se nos presentan como didácticas funcionales para nuestro propósito. Es claro que en los dos procesos, va inmerso de raíz el desarrollo de las habilidades del pensamiento, habilidades que debieran estimularse desde la edad temprana con el fin de tener una percepción y una aprehensión más significativa del mundo. Nos preguntamos entonces: ¿cómo se puede medir el desarrollo del pensamiento y por ende, el desarrollo del lenguaje?. Es claro que este proceso, en tanto sistemático y progresivo, se motiva, se estimula, se evalúa, no se  “califica”.

Finalmente, a partir del diálogo polifónico de nuestras experiencias, concluimos en que las prácticas evaluativas en el aula deben sustentarse en los propósitos de potenciar capacidades, socializar resultados, afianzar valores y actitudes, aprender de las experiencias, identificar los errores y afianzar los aciertos. La evaluación, entonces,  debemos asumirla como una actividad gratificante, útil y provechosa que permite detectar oportunamente dificultades, fortalezas y logros que conduzcan a la toma de decisiones adecuadas y oportunas en la formación de seres integrales desde todas las dimensiones del aprendizaje.



[1] MORENO, Bayardo Guadalupe. “¿Qué son Competencias?”. Artículo reseñado en la Revista GUIA No. 56 2001.


POEMAS

 

Claudia Rivera

 

 

MIEDO


Contemplo las manos
(las mismas que en la línea del Ecuador
inmortalizara el pintor)
y reparo en lo roído de las uñas,
el sabor de sangre, carne y llanto
en la boca trémula de indecisión.
Absurda condición del ser:
devorarse a sí
al no saciarse en la ansiedad del alma.

Temprano te venció el miedo
Lo llevas poseso en el cuerpo:
pálido, sudoroso, de nada.
Lo llevas poseso en los ojos:
quebrados, huidizos, marchitos
Lo llevas poseso en el rostro:
enjuto, ajado, sombrío.

No es posible ya, conciliar el sueño.
Las horas se escapan
y sólo el incesante latir Irrumpe
para decir que muriendo vives
con los monstruos de la infancia
que crecieron en sucesivas lunas,
desde cuando en noches nuevas
los trasladabas al lecho maternal,
donde lograbas apaciguarlos.

Hoy, enardecidos, definen su rostro:
una tierra extraña,
un país de males centenarios,
una historia repetida,
una vida fragmentada de dolores,
errores, desamores, desatinos.
un hijo receptor de angustias,
un hombre en franca derrota.
¡Qué horror vivir al asalto!.

¿Sólo para la muerte crecerán las uñas?
Así parece  vaticinarlo el pintor. 





DUALIDAD

El hombre como el olivo:
Milenaria subsistencia
entre azotes impíos
del verdugo que sucumbe su fruto.

Sembrado en el desamparo
de la mano creadora
en la tierra de la nada,
el cuerpo – tronco
lucha entre los límites de la vida
por endurecer su piel – corteza
que de entre aliento helado
y fuego calcinante
se curte y arrecia para resistir.

No hay lugar al descanso
en esta tierra roja.
El mundo no es sólo uno.
La dualidad hace el ser.
En dos se funden las estaciones:
el gris y  el amarillo,
la desnudez de los árboles
y el esplendor de las flores,
el amor y el odio,
la muerte y la vida.

Aún así, el hombre – olivo se reproduce
en la desgastada tierra de la inconciencia:
De sí el fruto verde intenso,
temprano ocre desencanto.
De sí el hijo savia – sangre enardecida,
pronto río de llanto inconsolable.

Cansado el hombre de serlo,
vaciado en barro,
plantado en el desierto,
de golpes vuelto a la vida,
bajo el olivo se desangra.
Abono del círculo que no se cierra.
¡Extraña manera de germinar en el dolor!




ESTADOS DEL ALMA

I

Salgo de mi casa al amanecer
Como pájaro  en desbandada desde sus ramas.
Vuelo alto y el sol no me quema.
El viento se cansa a mi lado
¡Me ufano de tal osadía!.

¡Cric- crac!
Me estrello contra los cristales
y descubro en el plumaje disperso
semillas  de vida que no  germinaron,
fragmentos de una historia en desacierto.

El vuelo es bajo, ahora.
Rastreo la canícula desgastada.
Aún no hallo la nueva  pieza extraviada.

Me recojo en casa y espero,
cual   pájaro en desasosiego,
el viento cíclico que anime el vuelo.
¡Vaya manía de creer que sin alas también se vuela!.



MUJER  I

Hay una mujer trasplantada
que adolece de hijos
y  casa a cuestas.
Que araña el asfalto
buscando la tierra fértil
donde plantar ilusiones arrancadas.
Que derrama sangre de pechos marchitos
                              cansados ya,
                              de alimentar los hijos de la guerra.

Hay una mujer que añora
sueños tempraneros,
destellos de  luciérnagas
en noches de lunas llenas,
el canto premonitorio de las ranas
en el lago sin fondo,
el olor a ordeño,
un fogón de leña,
la bruma en la montaña,
y su alba fresca.

Aurora,
(mujer de siglo atrás,
henchida  de  agua en los nacederos,
 fértil cuerpo – centro
en el ritual del sexo primigenio
coreado por los pájaros de la  Floresta)
has de recordar que en tiempos nobles
amasaste el sudor de los trabajadores
hambreados en larga mesa de madera,
y con sonrisa abierta tras la ventana
celebraste al hombre
lomo en tierra cosechado la vida.

Aurora,
No entiendes ya la terquedad
del roble que enraizado en su egoísmo
enarbola violencias ancestrales.

                              Hay, en tiempos malditos,
                              mujeres  que deambulan,
                              ciudades ajenas,  calles muertas,
agrio aliento, rostros impávidos
de desafectos y miserias,
almas desde siempre desterradas
que viviendo en la mentira,
hacen de su casa el lugar sin tierra.

De soledad se viste el rostro.
Las casas ya no habitan.
Los seres  se despueblan.

BILINGÜÍSMO, DESARROLLO DEL PENSAMIENTO Y LA PERSONALIDAD COLOMBIANA

Ejercicio de análisis sociolingüístico
Antonio Gómez- Tatik Carrión
VIII Semestre

Los colegios privados crecen en cantidades alarmantes, su oferta de colegio bilingüe o trilingüe, se repite en vallas públicas, volantes, páginas web y demás formas de difusión publicitaria.
La educación nacional avala estos procesos y da unos calificativos, para “incentivar” “motivar” “apoyar” estos procesos y aprendizajes del uso de la segunda lengua “inglés” en el desarrollo del estudiante, “alto” “superior” “muy superior” aparecen en las pancartas que dan cuenta del “nivel” que tendrían los estudiantes SI estudian en ese colegio.
Vale la pena aclarar que, el inglés como segunda lengua es muy importante para la comunicación mundial, pues desde un electrodoméstico hasta una conferencia hoy en día están en inglés y las traducciones pululan ya no sólo de forma oral y textual por profesionales sino también por buscadores de internet que ofrecen en contados instantes una traducción a nivel general de lo que se necesite pasar al otro idioma.
También es cierto, que los postulantes a diferentes empleos deben hablar inglés como requisito a la aspiración laboral, por esto mismo, los colegios públicos y privados se esfuerzan en mejorar sus cátedras en ésta área a fin de ser “competitivo” con el mercado nacional e internacional.
Respecto a este tema surgen varios interrogantes que como pedagogos nos cuestionamos, por ejemplo: ¿Por qué los niños no deciden sobre el idioma que quieren aprender? ¿Cómo se desarrolla el pensamiento en un colegio donde todas las clases son en inglés? ¿Cuál es el afán de querer “parecernos” o copiar modelos pedagógicos de países como Estados Unidos?
En el afán de querer “desarrollarnos” estamos olvidando lo realmente esencial que es la humanidad, nuestra cultura, nuestras raíces y costumbres…ahora en los colegios, el día del idioma hasta se traduce, todo lo que “adorna” nuestro colegio y aulas son carteleras en otros idiomas que pueden tener frases y mensajes interesantes, pero si no sabemos desarrollar nuestra conciencia en nuestro contexto inmediato, qué vamos a ponerle el corazón a lo que nos es ajeno, que no nos pertenece del todo. ¿Por qué si siempre hablamos de la tradición oral y de las ancestrales culturas indígenas, por qué no tener una clase de la lengua chibcha?
Todo se ha vuelto teoría y la práctica la contradice, saludos en inglés, oraciones en inglés, convocatorias, etc…pero se enseña en los colegios a pensar en inglés, es más ¿Se puede pensar en inglés? A veces las intervenciones de los estudiantes son mecánicas, si un estudiante hace una exposición verbal de cualquier tema y tiene problemas al tratar de abordar y expresar ideas, pánico escénico, inseguridad, repetición de palabras por falta de léxico, entre otras, nos preguntamos ¿Qué podemos esperar de intervenciones en inglés?
Nos ha llamado la atención el colegio Gimnasio Británico, muy “importante” en nuestro municipio y en la capital de nuestro país, en dicho colegio, se reciben todas las clases de las diferentes áreas en inglés, incluyendo deporte, artes y énfasis de otras materias, como dato curioso el colegio no enseña la historia de Colombia, enseña la historia de Estados Unidos porque los niños y jóvenes son educados para vivir allá y para trabajar allá, de modo que celebran el día de San Valentín, el día de gracias, las cuatro estaciones y los días feriados e importantes de ese país, incluso existen barras organizadas de los distintos equipos de fútbol y béisbol de las ligas norteamericanas; sin embargo, son colombianos, en su mayoría hijos de colombianos que no saben nada de Colombia, sus consultas e investigaciones para sus trabajos y tareas los hacen de diarios y periódicos de ese país y de Europa, por tanto están descontextualizados de nuestras realidades y vivencias como sociedad.
Concluyendo, así como el paradigma de desarrollo económico no podremos alcanzarlo nunca, pues es una carrera de nunca acabar, de igual manera el paradigma de ciudadano norteamericano y su nivel de vida, nunca lo vamos a lograr y esto que es lo que le venden a los niños y jóvenes estudiantes en los llamados colegios bilingües, solo puede llevar a estos niños y jóvenes al fracaso. Casos de estos ya se han visto y han sido denunciados, de cómo estos modelos, estos paradigmas, estas pretensiones de que pensemos y nos comportemos como norteamericanos o “ciudadanos del mundo” no es más que ahondar en nuestro desarraigo cultural y llevarnos al despeñadero emocional.
Desafortunadamente es una avalancha imposible de detener; la invasión de terminología en marcas, nombres de negocios y hasta oficinas chibchombianas de cobro como CRC Outsourcing-Credit RisK & Collection, que a lo mejor traduce Culebras Roedoras de Crédito. 

PRODUCCIÓN DE GUIÓN TEATRAL

             Había una vez…

Angélica medina - Eduardo Amézquita.
VI semestre.

Personajes:
Blanca nieves
Los tres cerditos
Lobo
Caperucita roja
Hombre araña
Príncipe
Narrador
           
NARRADOR  Y ahora les voy a contar la historia de Caperucita Roja. Bien... Había una vez una pequeña niña que...
           
BLANCANIEVES       ¡Socorro! ¡Socorro! ... Por favor, ¡alguien que me ayude!
           
NARRADOR  Pero ¿qué es esto? ¿Quién eres?
           
BLANCANIEVES       Soy Blanca nieves y mi madrasta me persigue. Quiere deshacerse de mí. Entonces yo...
           
NARRADOR  Espera pequeña. Yo soy el narrador y estoy contando la historia de Caperucita Roja. Tengo la impresión de que has llegado al cuento equivocado. De todos modos, por allí, encontrarás una casita. Métete adentro así puedes escapar de tu madrasta.
           
BLANCANIEVES       Oh ¡gracias¡ ¡Muchas gracias en serio! (golpea la puerta muchas veces).
           
TRES CERDITOS     ¿Quién está afuera haciendo semejante ruido?
           
BLANCANIEVES       Soy yo, Blanca nieves. Por favor sálvenme, enanitos. Mi madrasta me persigue. (la puerta se abre). Pero ustedes no son los enanitos. ¿Quiénes son?
           
TRES CERDITOS     ¡Por Dios! Somos los Tres Cerditos. Estamos ocultándonos del lobo feroz. ¡Ven, apúrate! No te preocupes, te protegeremos de tu madrasta. (de pronto aparece Caperucita Roja).
           
CAPERUCITA           (canturreando) Tra-la-la... tra-la-la... Sigo el sendero a la casa de mi abuelita...
           
NARRADOR  Eh ¡espera, espera! ¿No te das cuenta de que no es tu turno para aparecer en escena? Regresa allí y espera tu turno. (Caperucita Roja se dirige hacia un costado del escenario). Mmm ¿por dónde andaba? Ah sí... Caperucita Roja era...
           
HOMBRE ARAÑA     (entra al escenario a grito pelado) ¡Soy tan FUERTE! ¡Tan PODEROSO! ¡Soy INVENCIBLE!
           
NARRADOR  Pero... ¡de nuevo! ¡Todos se han decidido a arruinarme el dia! ¿Quién eres?

           
HOMBRE ARAÑA     ¿No me conoces? Yo soy el Hombre Araña, protector de los débiles y desamparados. ¡Estoy seguro que alguien me necesita aquí!
           
NARRADOR  No te necesitamos. ¿Puedes retirarte, por favor? (Spider Man se retira triste, en busca de otro trabajo). Bien, como les estaba diciendo, Caperucita Roja era una niña muy amable. Estaba llevándole pan y miel a su abuela que vivía en el bosque, cuando apareció un lobo...
           
LOBO Ah, ¡qué niña más bonita! ¿Quién eres?
           
CAPERUCITA           Soy Caperucita Roja pero mi color predilecto es el rosado. ¡¡Ja ja ja!! Pero... ¿qué está usted haciendo aquí?
           
LOBO Soy el lobo pero no le hago daño a nadie. (Ambos comienzan una charla amistosa cuando, de pronto, aparece el Príncipe Encantado).
           
PRINCIPE      Por favor, ¿podrían los dos probarse  este zapatito de cristal?
           
LOBO &
CAPERUCITA           (a dúo) ¡¡¿Un zapato de cristal?!!
           
PRINCIPE      Así es. Estoy buscando a Cenicienta. Y este zapato le pertenece.
           
BLANCANIEVES       (llega alborotada) ¡Escuché que llegó el Príncipe Encantado!

CAPERUCITA           (al lobo) Nunca se sabe qué puede pasar con "ciertos" personajes.
           
LOBO Tienes razón, dulzura.
           
NARRADOR  En fin, nadie deja que cuente el cuento. Entonces voy a terminarlo como sea. Cuando el Príncipe Encantado de "Cenicienta" vio a Blanca nieves, tiró el zapato y decidió casarse y tener una gran fiesta de casamiento. Invitaron a Caperucita Roja, al Lobo, a los Tres Cerditos, al Hombre Araña y a los Siete Enanitos. Todos ellos fueron muy felices, especialmente el Lobo que era un lobo bueno porque no quería hacerle daño a nadie.


           

UN NUEVO DÍA

Ejercicio de análisis comunicativo de un día común.

Por: Lucía Salazar Garzón.
II Semestre Comunicación, lenguaje y pensamiento.

En el municipio de Tocancipá, funcionan los Centros Infantiles de Cultura Productiva. Son lugares donde los padres de familia del municipio  pueden dejar a sus hijos en edad escolar desde las 5:00 de la mañana y hasta las 5:00 de la tarde de Lunes a Viernes, confiados en que personas idóneas se encargarán de brindarles su cuidado, atención, asesoría en tareas y refuerzo escolar entre otros.
Juanito Pérez, es un niño de 7 años de edad y cursa segundo grado de primaria en el Colegio San Luis Gonzaga en la Jornada de la tarde. Un día normal durante la semana para Juanito, transcurre de la siguiente manera: Su mamita lo despierta a las 4:00 a.m. para que se levante (comunicación oral) y se dé un buen baño, se vista y se organice para asistir al CICP, lugar donde se harán cargo de él durante el día. Ya listos los dos, salen de la casa y avanzan a paso rápido 15 cuadras (comunicación cinésica) con el fin de llegar pronto y evitar que la ruta del trabajo deje a su mamita. Ya en la puerta del CICP y siendo las 5:00 su mamita oprime el timbre (comunicación auditiva) y la profesora se dirige a atender el llamado, sale y brinda un cordial saludo a la mamita y al niño (comunicación oral), el niño ingresa al lugar y la mamita corre a alcanzar su ruta.
Ya dispuestos en el lugar, continúan llegando más niños y niñas compañeritos de Juanito, quienes se saludan mediante gestos (comunicación gestual) y seguidamente se disponen a observar algo de televisión, (comunicación visual-auditiva) entre tanto, la ecónoma se encarga de preparar el desayuno, el olor a huevos pericos y chocolate, invade el olfato de los chiquillos, (comunicación olfativa). Antes de iniciar con el desayuno, la profesora encargada del grupo, apaga el televisor y organiza a los niños para realizar la oración de acción de gracias que es repetida en coro por todos los niños, (comunicación oral) luego se procede a servir el desayuno a cada uno de los niños.
Terminado el desayuno, Juanito se cepilla los dientes y se organiza en el patio para proceder a los ejercicios de calentamiento que dirigidos por la profesora se realizan a diario en el patio (comunicación cinésica), terminados los ejercicios, Juanito se dirige al salón donde la profesora les lee un cuento, (comunicación auditiva) les muestra unas láminas relacionadas con el cuento (comunicación visual) y seguidamente se socializa y se llega a una conclusión sobre la enseñanza que ha dejado dicha lectura (comunicación oral).
Hacia las 10 de la mañana, Juanito toma su refrigerio, una deliciosa ensalada de frutas y aprovecha para compartir con sus amigos acerca de las pilatunas realizadas el día anterior (comunicación oral), seguidamente se dirige a su salón y es asesorado por su profesora para la realización de sus tareas escolares.
A las 12:00 del día pasa al comedor a recibir su almuerzo y luego de reposar 5 minutos mira el reloj y observa (comunicación visual) que es tiempo de cepillarse los dientes y prepararse para asistir a su colegio, luego toma su maleta y se dirige a hacer la fila para dirigirse a su colegio. La profesora encargada da la orden (comunicación oral) de dirigirse  en fila y por los andenes para evitar accidentes, así que todos juntos marchan rumbo al colegio, pero al llegar a la calle que conduce justo al colegio, Juanito observa que hay unas cintas amarillas con negro (comunicación altamente convencional) que indican que no se puede pasar porque están trabajando en la vía, así que le dice  con gran afán a su profe que deben dar la vuelta por la otra cuadra (comunicación oral), la profesora hace señas a los niños para que se dirijan por la otra cuadra (comunicación gestual) para llegar a su colegio.
A la 1de la tarde, Juanito ingresa a su colegio, escucha el timbre (comunicación auditiva) que indica el inicio de clases. Ya ubicado en su aula, se dispone a dar a conocer a su profesora la tarea que realizó en su cuaderno (comunicación escrita) y feliz por sus buenos resultados continúa su jornada escolar. Siendo las 5 de la tarde se dirige al patio central para la Izada de Bandera programada para ese día, sus compañeros del grado 5° interpretan los Himnos (comunicación connotativa) y representan varios personajes de la historia.
A las 6 de la tarde, sale de estudiar y se dirige a su casa al reencuentro con su familia. Al llegar a casa, con un silencioso abrazo, saluda a su mamita (comunicación gestual) quien lo esperaba ansiosa. Luego de compartir sus anécdotas del día, (comunicación oral), cenar y orar, se va a la camita a descansar para esperar la llegada de un nuevo día.


ANÁLIS DEL ACTO COMUNICATIVO

ENCODIFICA: Lucía Salazar Garzón
DECODIFICA: Lector, profesora.
ENCODIFICAR                                                                               DECODIFICAR
La mamita llama a Juanito                                                           Juanito se levanta
La mamita timbra                                                                La profesora abre la puerta
Televisor prendido                                                             niñ@s miran y escuchan
Olor a huevos pericos y chocolate                                 Se activa el olfato
La profesora dice la oración                                            los niñ@s escuchan y repiten
Juanito habla acerca de la pilatunas                             Sus compañeros escuchan
La profesora dice que hagan la fila                                Los niños hacen la fila
Cintas amarillas con negro                                              Juanito no pasa
La profesora hace señas                                                  Los niños pasan por otro lado
Suena el timbre del colegio                                              Juanito ingresa a clases
Juanito muestra el cuaderno ala profe                          Profesora lee el contenido
Compañeros interpretan Himnos                                               Los demás niños  escuchan
Juanito abraza a su mamá                                                          La mamá recibe el abrazo.